El cruel hecho conmociona al barrio Interlaken.
Una persona desnaturalizada tapó con cemento las materas de varias palmas, que adornan una vivienda de la calle 15 con carrera Séptima, diagonal al antíguo edificio donde funcionó inicialmente la taberna La Vieja Enramada.
Las plantas que llevaban varios años sobre el andén encerradas en materas construidas en ladrillos, se encuentran sin suministro de agua por el taponamiento, considerándose un acto reprochable por parte de la comunidad del sector.
Este medio de comunicación intentó buscar al propietario de esta casa donde hoy funciona un taller de muebles, pero no fue posible que alguien diera alguna explicación.
Se espera el pronunciamiento que entreguen los entes encargados de la arborización de la ciudad, así como la opinión de los colectivos ambientales frente a este inexplicable suceso.