Dos de ellos buscarán cupo en procesos electorales regionales.
Su último año en el Congreso están viviendo los representantes Adriana Matiz, José Élver Hernández y Ángel Gaitán, quienes no estarán en el tarjetón de la Cámara en 2022.
Adriana Magaly Matiz, buscará la Gobernación del Tolima en 2023, de la mano de la Casa Barreto, grupo en el que ha militado en los últimos años y con el que alcanzó la Cámara en 2018. Matiz se ha destacado en temas de inclusión de género, en el trámite de la cadena perpetua para violadores de niños, entre otros. A nivel local también ha acompañado muchas iniciativas de equidad e inclusión.
En esta legislatura acompañará el proyecto de ley que busca transformar a la Policía en una institución que sea garante de los Derechos Humanos.
Acompañamos a los @mindefensa y @MinInterior, a la radicación de dos proyectos de ley, que nos permitan una transformación integral de la institución, a través de su fortalecimiento en DDHH y la profesionalización de los uniformados.
— Adriana Magali Matiz 🇨🇴 (@AdrianaMatizTol) July 21, 2021
Es una incógnita hacia qué candidato de la estructura barretista a la Cámara pueda inclinar su caudal la dirigente Matiz Vargas.
José Élver Hernández, también buscará la Gobernación y es casi seguro que deba medirse frente a Adriana Matiz en algún proceso de selección o consulta ya que ambos militan en el partido Conservador. Choco empujará la aspiración del diputado Alejandro Martínez, quien busca sucederlo en la Cámara.
🤝 Este último año luchamos por proyectos que beneficiaron a los tolimenses, por lo que no descansaremos y seguiremos el camino hacia el progreso, para aumentar los recursos que lleguen a cada municipio de nuestro Departamento. ♥️💛
¡Mi compromiso es con todos ustedes! pic.twitter.com/uo4CN1b8lh
— José Elver Hernández Casas (@chocotolima) July 20, 2021
Ángel María Gaitán. Con más pena que gloria culmina su segundo período en la Cámara el dirigente del liberalismo, quien no tiene proyectos, iniciativas, ni obras que mostrar. Se dedicó más a la manzanilla, clientelismo y burocracia, en casos probados como en el Igac, o su propia UTL, donde rotaban cada tanto las cuotas que se distribuyen para tal fin. En 2014 logró llegar a la Cámara con el apoyo de la Gobernación de Luis Carlos Delgado. En 2018 tuvo serios problemas para lograr la reelección y tuvo que se apuntalada su curul con votos ‘alternativos’ y burocracia de la Alcaldía de Guillermo Alfonso Jaramillo.
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Es decir que la presencia tolimense en la Cámara de Representantes se renovaría hasta en un 50 por ciento, con otros rostros y propuestas.
Que horror.estos » personajillos» que nunca han hecho nada por el tolima y ahora quieren darselas de grandes » patriotas» para llegar a » gobernarnos» patrocinados o mejor con la imposicion del » gamonal mayor»