Así funcionan los millonarios recursos que se le piden a los bancos desde el sector público.
El alcalde de Ibagué Andrés Hurtado anunció en una reciente entrevista con El Nuevo Día que tramitaría ante el Concejo la autorización para un nuevo cupo de endeudamiento por 60 mil millones de pesos, aumentado aún más el nivel de créditos por pagar a los bancos, con cargo a vigencias futuras, por parte del municipio.
Es de recordar que en 2020, el municipio se endeudó en 105 mil millones, en un proceso que no estuvo exento de polémicas.
“Vamos a plantearlo de la siguiente manera: $25.000 millones van para reposiciones de redes de acueducto y alcantarillado y pavimentación de vías urbanas; $2.500 millones para el bulevar de la Quinta, $2.500 millones para salones comunales, $5.000 millones para gasificación del Cañón del Combeima, San Juan de la China y San Bernardo; $5.000 millones para construir placas huellas en vías terciarias, $10.000 millones para modernizar los polideportivos de Bocaneme, Maracaná y Ciudadela Simón Bolívar, $4.500 millones para el Capa y $5.000 millones para la formación de programadores con las universidades de Ibagué y del Tolima. Si los honorables concejales lo aprueban, estoy seguro de que vamos a poder hacer todo esto y generar muchos empleos”, dijo Hurtado.
En dos tuits resumimos la manera en la que han funcionado los famosos empréstitos en la capital tolimense:
Revisen cómo operaba Héctor Marín, del Banco Popular de Ibagué. En tres periodos consecutivos ponía los secretarios de Hacienda de su resorte y derivó millonadas a través de fundaciones y otras cosas.
— A la luz Pública (@alaluzpublica1) March 21, 2021