Sandra Liliana Torres sigue haciendo de las suyas.
Durante todo el periodo y finalizando el 2019, la titular de la cartera de Salud, hizo lo que quiso en la dependencia a su cargo, con el manejo de los recursos a su cargo.
Ahora, se conoció que no trasladó los dineros para gastos de funcionamiento de hospitales como el San Juan Bautista de Chaparral o el Reina Sofía de Lérida.
Es decir, que los empleados de dichos hospitales no contarán con dinero para pasar las festividades, ni primas ni otros emolumentos; amén de que les adeudan en algunos casos, hasta tres y cuatro meses de salarios.
En el caso del hospital de Lérida, la situación se hace más caótica ya que el Departamento le adeuda en transferencias, de vigencias anteriores, más de dos mil millones de pesos al centro asistencial.
Todo esto ocurre, y según se supo, pese a que el gobernador Oscar Barreto le ordenó a Sandra Liliana Torres ponerse al día con estas acreencias y saldar cuentas al término del presente periodo fiscal.
Mientras tanto, la secretaria de Salud sigue incrementando el patrimonio propio y el de sus allegados, además de los retoques estéticos, evidentes en su cuerpo, pagados sin duda con recursos o cruces de favores, que entrañan asuntos de lo público que no pueden ser pasados por alto en el marco de la intimidad personal.
¡Así está la salud en el Tolima!
Este es un editorial del director de A la luz Pública.