churumbelas

Simbolismo de las churumbelas en nuevas etapas de vida

Las churumbelas están entre las joyas mejor valoradas, puesto que no solo se trata de una pieza elegante y atemporal, sino también de una pieza que transmite muchas sensaciones y el suficiente simbolismo como para ser un regalo con sentido.

Cuando una persona toma la decisión de obsequiar una pieza de esta envergadura, como pudiera ser una churumbela oro blanco, lo hace porque quiere transmitir las sensaciones adecuadas y el simbolismo suficiente. Dicho de otro modo: quiere transmitir la unión, la eternidad y el amor en un mismo regalo.

El simbolismo de las churumbelas

Analizar el simbolismo de cada una de las piezas de la fina joyería es fundamental para saber cuál regalar en cada ocasión. En el caso de las churumbelas, caracterizadas por un diseño continuo de un anillo y un adorno justo de diamantes en su exterior, describir su simbolismo implica conocer la historia detrás de cada una de ellas a través del tiempo. Muchos conceptos quedan aplicados.

Ciclos y continuidad

Las churumbelas tienen una forma circular perfecta, lo que pudiera entenderse siempre como la continuidad del ciclo de la vida, que no tiene ni principio ni fin, pero que cada tanto se renueva para dar sentido a nuevos comienzos o nuevos niveles.

Por eso, regalar una churumbela al iniciar una nueva etapa, sea casarse, sea un aniversario, sea tener un hijo o graduarse, simboliza la continuidad y la promesa de que lo que vendrá también estará cargado de momentos valiosos.

Amor y compromiso

Así como los anillos de compromiso se regalan para fortalecer el compromiso del casamiento próximo, las churumbelas también se pueden regalar con esta finalidad, aunque no necesariamente para un evento próximo (casamiento), sino más bien como un compromiso perpetuo de apoyo, de amor incondicional y de lazos emocionales sólidos.

Por eso, se suelen regalar en un aniversario, tras el nacimiento de un hijo o tras un logro importante, donde la churumbela pareciera decir “Estoy aquí. Siempre estaré aquí para ti”.

Nuevos comienzos

El ciclo de la vida es continuo, sin principio ni fin, sí, pero también indica que cada tanto pueden darse nuevos capítulos y nuevos niveles en la vida de la persona, de la pareja, de la familia. Una churumbela representa la fuerza de carácter necesaria para afrontar cada uno de esos comienzos, con los cambios y los retos que representan.

De la misma manera, pueden obsequiarse como una manera de demostrar que uno de esos procesos y cambios se han superado con éxito.

Empoderamiento

La confianza, la capacidad de superar cualquier desafío, la elegancia por encima de lo convencional, son algunos de los detalles que parecieran transmitir las manos que lucen una bonita churumbela. Regalarlas es una forma de demostrar lo mucho que le importa la otra persona.

Diseños de churumbelas para cada estilo

Aunque a lo largo de los años las churumbelas siempre han tenido diseños clásicos y sencillos, hoy en día los maestros orfebres y las mejores joyerías se adaptan mucho a lo que busquen los clientes. Así, se pueden conseguir:

  • Churumbelas clásicas, que tienen un diseño muy sencillo, con colores neutros y sin tantos alardes de diseño.
  • Churumbelas modernas, donde la innovación y el desenfado forman parte de su diseño, apostando por formas geométricas complejas y diamantes coloridos.

El oro blanco: un símbolo de pureza y elegancia

Dentro de las churumbelas, el material más codiciado es el oro blanco. No solo porque transmite la pureza y elegancia propia del material y de la prenda en sí, sino porque puede tener un significado mucho más profundo, que acompaña a la carga simbólica que ya tiene la pieza en sí.

  • Pureza: el oro blanco siempre se ha asociado a la inocencia y a la perfección, por lo que simboliza la pureza del amor.
  • Nuevos comienzos: el blanco simboliza un lienzo vacío, por lo que representa nuevos comienzos y nuevas oportunidades.
Deja tu comentario