Doña Genoveva Uribe de Ospina, quien tiene un negocio de venta de víveres en la carrera Segunda, entre calles Séptima y Octava, se despertó esta mañana con la sorpresa de una ventana que rompieron y forzaron amigos de lo ajeno, para penetrar a su inmueble.
Los delincuentes, se encontraron con la seguridad de la tienda Mi Ventanita, reforzada con candados y cadenas, y no pudieron hacer de las suyas.
Consultada por A la luz Pública, Genoveva Uribe, dijo “¿dónde queda la seguridad de La Pola? Si tenemos un CAI cerca y por acá pagan vigilancia privada”.
Las autoridades recomiendan extremar las medidas de seguridad en esta época de fin de año, no dejar las residencias solas, y alertar a la Policía ante movimientos o personas extrañas.