Vacuna

La colita es mía

Luis Carlos Rojas Garcìa ‘Kaell García1
Luis Carlos Rojas García

Y dice la canción: “La colita es mía, es mía doctor, la inyección, no, no”… ¿No?

Y va de cuento, como decía el columnista aquel:

Siglo XVIII

1796: Primera vacuna para viruela.

Siglo XIX

1879: Primera vacuna para la diarrea crónica intestinal grave.
1881: Primera vacuna para el ántrax.
1882: Primera vacuna para la rabia.
1884: Primera vacuna para el cólera.
1890: Primera vacuna para el tétanos.
1890: Primera vacuna para la difteria.
1897: Primera vacuna para la peste.

Siglo XX

1926: Primera vacuna para tos ferina.
1927: Primera vacuna para la tuberculosis.
1937: Primera vacuna para la fiebre amarilla.
1937: Primera vacuna para el tifus.
1945: Primera vacuna para la gripe.
1952: Primera vacuna para la poliomielitis.
1954: Primera vacuna para la encefalitis japonesa.
1962: Primera vacuna oral para la poliomielitis.
1964: Primera vacuna para el sarampión.
1967: Primera vacuna para las paperas.
1970: Primera vacuna para la rubéola.
1974: Primera vacuna para la varicela.
1977: Primera vacuna para la neumonía (Streptococcus pneumoniae).
1978: Primera vacuna para la meningitis (Neisseria meningitidis).
1981: Primera vacuna para la hepatitis B.
1985: Primera vacuna para la haemophilus influenzae tipo b (HiB).
1992: Primera vacuna para la hepatitis A.
1998: Primera vacuna para la enfermedad de Lyme.

Siglo XXI

2005: Primera vacuna para el virus del papiloma humano (principal factor de riesgo del cáncer de cérvix).
2008: Primera vacuna para prevenir la adicción a la heroína y a la cocaína (aunque siguen haciéndose experimentos con esta vacuna para comprobar su efectividad).
2009: Posible vacuna contra la hepatitis C, primera vacuna contra la Gripe A (H1N1).
(Tomado de algún rincón de internet)

2020, en menos de un año sacan la primera vacuna contra el Coronavirus, la pandemia más popular de todos los tiempos. (Fuente: reflexión del autor)

Como se puede dar cuenta, la colita no es suya, nunca lo ha sido y nunca lo será. Dicho en otras palabras, y, aunque ya no es un secreto que no hay una vacuna que prohíba el contagio del Covid-19 ni que ofrezca una solución efectiva y, que los efectos secundarios son todavía un misterio, rece para que en Polombia con P, no se vayan a robar el dinero de la vacuna, como suelen hacerlo por supuesto; y sea cual sea la vacuna que compren, porque hay varias en el mercado, alcance para vacunar a gran parte de la población.

De todas maneras, y aunque ahora quieran magnificar a la vacuna con toda esa parafernalia que algunos le están haciendo, sin querer quitarle importancia a la misma desde luego, volvemos a lo mismo ya que: ¡Así se sabía que sería el negocio socio!

Por: Luis Carlos Rojas García, escritor.

Deja tu comentario

Le podría interesar

Luis Carlos

El partido de la muerte (La pasión del fútbol)

Hace unos años escribí una columna sobre el fanatismo religioso que le tienen al fútbol …

Deja un comentario