
Pese a haber perdido la Alcaldía sacó una apreciable votación.
Muchos veían al joven Emmanuel resignado al fondo de la tabla, con escasos votos. En lugar de eso sacó 13.890 votos, quedando por encima de Pompilio Avendaño que se vio resignado con 9.031 sufragios.
Sin duda que esos votos le salieron demasiado caros a Avendaño pues era uno de los candidatos que más recursos publicitarios y logísticos empleó para llegarle a un electorado que de nuevo, le ha dado la espalda a su nada renovador mensaje.
En cambio, Arango, logró superar la escasa votación de la consulta interna del Centro Democrático, poco más de 900 votos, y posicionarse como un factor interesante en la política local.
Parodiando al aforismo futbolero, Emannuel perdió, pero ganó un poco.
Y eso que su propio partido lo había abandonado. Líderes sin votos, y la lista al Concejo del partido uribista se pasaron al bando de Ricardo Ferro, a pocos días de las elecciones.
Hará falta otro análisis para determinar si los votos son de Emmanuel Arango, o fueron endosados quizá por la figura del expresidente Álvaro Uribe; aunque el hoy senador se negó a visitar Ibagué para echarle una mano a su candidato por el que nadie daba un peso hace algunos días.
Hoy con su votación, Arango les ha tapado la boca a sus contradictores.