
Nadie quiere delatar al exalcalde en su responsabilidad por la debacle de los Juegos Nacionales.
Primero fue el abogado Orlando Arciniegas, quien luego de su captura en la frontera con Ecuador, concedió una entrevista a Caracol Radio donde indicó: “Luis H. Rodríguez no tiene absolutamente nada que ver en este asunto. Yo creo que Luis H. demostró que es un hombre serio, es un hombre honesto y Luis H. no tiene nada que ver”.
Y esta semana, el ex secretario de Hacienda Oswaldo Mestre, reiteró que su antiguo jefe es ajeno al robo de dinero y amaño de licitaciones, que se sabe con certeza, rodearon los diseños y las obras para los Juegos: «no tiene nada que ver en esos temas y jamás me pidió acatar las instrucciones de Arciniegas«, señaló Mestre antes de ser enviado a la cárcel de Líbano, con medida de aseguramiento.
Lo único que hay hasta ahora contra Luis H. es la declaración rendida por el testaferro de Orlando Arciniegas, Amaury Elías Blanquicet, quien refiere que el abogado le comentó que de todo el dinero de coimas y sobornos que se consiguiera de los Juegos debían llevar al exalcalde en un “20 por ciento”.
No se sabe si los acusados están protegiendo a Luis H., evitando que afronte el radar de la justicia, o si la lealtad hacia este los está llevando a callar lo que saben sobre las andanzas del mandatario. Habrá que ver cuánto le dura al exalcalde el efecto ‘teflón’ del que parece estar gozando, inmune a cualquier investigación o medida punitiva.
Ha pasado más de un año desde que se conociera que Ibagué se quedaba sin los Juegos, y sin los escenarios deportivos, y Luis H. Rodríguez sigue en la comodidad del green del Club Campestre, sin darle la cara a los ibaguereños, o entregar explicaciones sobre los múltiples desafueros cometidos en su administración.