Más de 20 años de obras y estudios y nada que llega el agua.
El presidente del Concejo de Ibagué, Camilo Delgado, se preguntó si el acueducto complementario se está volviendo un mito, una realidad o un elefante blanco para los ibaguereños.
“¿Es la solución a los problemas de abastecimiento a futuro en Ibagué?”, se preguntó y volvió a inquietarse al señalar si el acueducto sería una utopía en cuanto a su culminación.
“Por documentación recaudada e investigaciones, he tratado de entender este enredo que gira en torno al acueducto complementario y somos conscientes que el proyecto ha sufrido baches con una cadena de irregularidades por la firma del contrato ambiguo del Ibal con el consorcio Acualterno”, afirmó Delgado.
“Uno no entiende cómo se firma un contrato en esas condiciones donde finalmente la posición dominante no es del contratante sino del contratista, que termina poniendo los precios”, dijo.
Nuevamente se preguntó cuántas reformulaciones ha tenido el proyecto y si impactarán el presupuesto fijado para la primera fase.
También tocó el tema de la tubería que permanece abandonada en un predio de la ciudad y señaló que la ciudadanía cree que esa tubería es un monumento a la desidia.
“Por esa tubería se paga arriendo por estar al sol al agua y uno se pregunta ¿cuál será el futuro de esta tubería?”, señaló Delgado.
“El anterior gerente dijo una mentira al señalar que iba a trasladar la tubería para dejar de pagar arriendo, y eso nunca ocurrió”, concluyó el presidente del Concejo de Ibagué.